Uno de los objetivos principales de la Policía Metropolitana de Cartagena, es promover en la comunidad buenas prácticas ambientales a través de la enseñanza de hábitos y medidas sencillas de conservación de los ecosistemas, contribuyendo a un medio ambiente limpio y sin basuras, fortaleciendo la protección de los recursos naturales y la conservación de los parques naturales, así como las playas ubicadas en esta reserva marina.
Cerca de dos toneladas residuos acumulados en Playa Blanca fueron recolectados durante esta jornada, liderada por diferentes especialidades de la Policía Metropolitana de Cartagena: Policía Ambiental y Ecológica, Policía de Turismo, Grupo de Carabineros y el área de Prevención y educación ciudadana, contando con el valioso apoyo de la Armada Nacional, Parques Nacionales, Fundación Decamerón, Fundación Mamonal, Defensa Civil, la Empresa de Aseo Urbano, diferentes grupos ambientales, servidores turísticos e integrantes de la comunidad.
Un grupo conformado por quince buzos de la Armada Nacional, con la ayuda de otro equipo de voluntarios, emplearon botes para extraer del fondo del mar: plástico, latas, botellas, madera, hierro y otros metales que atentan contra la vida marina y los corales.
Con el apoyo del Operador Aseo Urbano se logró recoger dos toneladas de desechos, entre bolsas, desechables, llantas, Icopor y envases de plástico principalmente, que serán enviados a un centro de acopio para ser clasificados y reciclados.
Se realizaron charlas de sensibilización ambiental, entregando recomendaciones puntuales a la comunidad, operadores turísticos y vendedores, para la protección de los recursos naturales, para que conviertan en ejemplo de las buenas prácticas en el cuidado del planeta y de este importante ecosistema.
Durante la jornada de sensibilización adelantada por la Policía Metropolitana de Cartagena, un pescador residente en el corregimiento de Ararca entregó de manera voluntaria una tortuga carey, con un peso aproximado a los 5 kilos, para lo cual un grupo de funcionarios del Grupo de Protección Ambiental y Ecológica se trasladaron hasta esa apartada zona, logrando el rescate de esta especie protegida y en vía de extinción.
Tras la revisión por parte del personal de Parques Naturales, un biólogo marino determinó su buen estado, siendo hidratada y puesta en periodo de observación, para ser posteriormente liberada en su habitad.
