Cartagena se viste de grandes actividades para acoger a visitantes y locales durante la semana mayor. Entre estas actividades, tenemos el concierto Cartagena Gospel Choir, el coro de música góspel más grande de Colombia. Un evento sin precedentes que reunirá a más de 100 voces en escena, hoy a las 6:30 pm en el Salón Pierre Daguet de la Institución Universitaria de Bellas Artes y Ciencias de Bolívar (Unibac).
Para conocer detalles del evento y entender la importancia de este tipo de espacios para los cartageneros, conversamos con Alvaro Mackenzie, director de la iniciativa cultural Cartagena Góspel Choir, grupo que se presentó en la Plaza de los Coches, en el marco del X Festival de Coros Cartagena de Indias: La magia del Caribe que organiza el Instituto de Patrimonio y Cultura de Cartagena (IPCC).
¿Cómo surge la iniciativa Cartagena Gospel Choir?
A.M.: Empezó este afán de la música góspel por un semillero en la universidad Bellas Artes, el cual dirijo hace aproximadamente 4 años. Y siempre he mantenido la idea de crear escenarios que permitan que la gente reconozca la música góspel más allá de lo eclesiástico, de lo religioso, que es esencialmente en lo que pensamos cuando nos hablan de góspel.
¿Por qué surge esta iniciativa precisamente con el género góspel y qué importancia cobra en una ciudad como Cartagena?
A.M.: Surge porque hay muchas cosas similares en el proceso de colonización en toda Latinoamérica, principalmente en el Caribe. Las sonoridades son muy parecidas porque son músicas de herencia africana, hay mucha identidad transmitida desde esa música, desde el góspel, tú lo sientes, eso sería lo primero. Lo segundo es que en Colombia, en la isla de San Andrés se viene haciendo lo que es el Gospel Raizal que es el epicentro del góspel en Colombia, nosotros como Cartagena recibimos esa herencia de San Andrés, las primeras iglesias bautistas de Cartagena fueron lideradas por pastores sanadresanos y la mayoría de la congregación era de este territorio. Todos los cantos de San Andrés influenciados por el góspel afroamericano, tuvieron presencia un periodo largo en Cartagena, principalmente en las iglesias bautistas. Luego la iglesia se modernizó, se incluyeron más instrumentos, menos coros, se incluyeron más ritmos, más góspel latinoamericano y se dejó de lado las raíces afro eclesiásticas. Entendiendo que el góspel nace en las iglesias del sur de los Estados Unidos, Georgia, en la región del Missisipi como una música eclesiástica, música de iglesia, congregacional.
¿Cómo es entonces esa transición de la investigación en música góspel a generar un espacio de interés entre jóvenes, empezando por estudiantes de Bellas Artes, que sea más práctico y que incluya otros escenarios?
A.M.: El grupo inicial fue de varones, luego se hizo uno mixto; todo comienza como una exploración. De este modo el góspel se radica en la academia y deja de estar en las iglesias, me refiero en este sentido, al góspel afro, que comprende a todo este tipo de expresiones en el continente americano. Pasando a la academia, el góspel se convierte en una expresión cultural, artística. Similar a lo que ocurre en San Andrés, donde el góspel sale de la iglesia y la academia y se inserta en la cultura, trasciende otros escenarios fuera del religioso. Esto es en esencia lo que el proyecto propone, poner la música fuera de iglesia y plantearlo como algo cultural.
Entendiendo el sentido cultural con el que se plantea la iniciativa ¿Cómo presentar esta novedosa idea en Cartagena desde el escenario turístico y atendiendo la diversidad del público cartagenero?
A.M.: Cartagena es una ciudad con mucha historia y el góspel viene de herencia esencialmente africana. En Bellas artes tenemos un coro que se llama Africa Gospel, que retoma todos esos elementos africanos. Gospel significa evangelio, todo lo que comprende música protestante. En Estados Unidos la música de este tipo tiene mucha acogida, la gente paga para ir a iglesias negras como parte de paquetes turísticos. El góspel ha trascendido fronteras geográficas, ya no es solo Norte América. En Colombia se está adelantando este mismo proceso de inserción. En Bogotá tenemos el Gospel al parque, Medellín tiene el Show Góspel Medellín, Montería tiene un festival de góspel, Santa Marta también, menos Cartagena.
Nos hemos convertido en pioneros de este tipo de música en la ciudad y más aún como escenario artístico y cultural, que entre otras cosas, reúne a tantas personas. El coro más grande en Colombia que haga música góspel, eso ya es novedoso.
¿Qué diferencia esta iniciativa de las que se han venido realizando en otras ciudades de Colombia?
A.M.: El aspecto diferenciador del coro está en las características de las personas que pertenecen a él: gente de iglesias, católicas, cristianas, ateos, personas que cantan, que no cantan, chicos de 14 años, jóvenes, empresarios, gente del medio, personas de hasta 82 años. No quisimos imponer límites en quienes pudieran participar.
¿Cómo fue el proceso de preparación del Cartagena Gospel Choir?
A.M.: Para preparar todo esto empezamos con un workshop (taller), con el que lanzamos la convocatoria y esto se hizo solo a través de redes sociales, pasó algo curioso porque no utilizamos medios masivos, ni hicimos publicidad, todo fue por el boca a boca y el apoyo de las redes. Se inscribieron 200 personas y en el taller participaron 100 personas. Empezamos el 29 de enero de este año y el Cartagena Gospel Choir será el cierre de la experiencia góspel.
¿Estaríamos hablando entonces del Cartagena Gospel Choir como el resultado del proceso formativo que ustedes impartieron a los participantes del workshop?
A.M.: No lo podríamos llamar un proceso formativo, más bien es un proceso experiencial porque el góspel no es el tipo de música que vas a un concierto y te sientas a cantar, sino que tienes que vivirlo, cantar, moverte, no es un recital, es una experiencia tanto para quienes están delante realizando la presentación como para los espectadores
¿Quiénes hacen realidad el Cartagena Gospel choir y los talleres que han realizado previamente?
A.M.: Somos un equipo pequeño. Actualmente estamos armando un equipo de prensa, tenemos encargados del diseño estratégica del proyecto, encargados de finanzas, gente de logística, secretaria general y yo como director musical. No es un grupo numeroso, pero trabamos arduamente.
¿Qué expectativas tienen frente al evento y como esperan que sea la recepción del público cartagenero?
A.M.: Todas positivas, creo que por la magnitud del coro, por el asunto de que es música góspel que reúne a tantas voces, convocará buen público, sobre todo por curiosidad. Nosotros en el Caribe somos muy curiosos. Y expectativas respecto sobre qué viene luego de esto, esperamos seguir trabajando, darle la oportunidad de participar a más personas, generar una experiencia musical y creo que a partir de los comentarios de los participantes es posible aumentar este espacio artístico, cultural e incluyente.