A través de la acuciosa pluma de Senén González Vélez, escritor, abogado y humanista cartagenero hemos disfrutado muchas anécdotas del cual nos hace recordar lo bonito que es identificarse con nuestra cultura.
Senen, es uno de esos personajes que todavía escribe en su libre albedrío sin herir susceptibilidades con la verdadera diplomacia que lo representa, tal vez por eso se ha ganado cierto reconocimiento en sus cargos cuando pasó por la Dirección del DAS en Barranquilla o simplemente cuando fue Director de Turismo de Cartagena, quedaron sembradas ciertas ideologías de ese Si y ese No que habitaba en su escritorio, el entrar a esa oficina ya la gente sabia que este ilustre caballero tenia dos respuestas y que no le temblaba su voz para saber decir NO.
Es por ello, que en este recorderis de los amigos, Senen ha marcado un lugar importante en la ciudad de Cartagena y en su famoso Barrio Manga del cual es recordado por todos, así como en su entrañable amigo Chenco Gomez, hoy viviendo fuera del país.
Hacemos parte de una sociedad en la que a sus miembros les cuesta definirse a sí mismos. Algunos inmersos en el complejo de las relaciones interpersonales no navegan en las aguas de su interior, no se preguntan quiénes son y de dónde vienen, sino que viven sin conocerse emprendiendo un viaje al exterior de sí, por eso la gente sabe en qué trabaja, qué estudió, donde vive, pero le cuesta decir quién es. Las personas de nuestro tiempo viven tan ocupadas y entretenidas que no les queda un rato para autopercibirse y autoreconocerse, y esta capacidad de definirnos a nosotros mismos, con respecto a nuestra ubicación en el espacio social es lo que llamamos identidad. Pero este no es el caso de Senen Gonzalez, el con su pluma todavía expresa que existimos en un mundo que nos da la garantia de seguir volando y que esos 73 años son el ocaso de una vida que mueve ciertos amaneceres.
Por: Nena Botero de Giha
Gerente General Tourism Hotels Inmobiliaria.