ETCAR construye lavaderos comunitarios en Bocachica, Cartagena

ETCAR

La obra hace parte de la estrategia de conservación y fomento de apropiación social de los bienes patrimoniales de este poblado, en la Isla de Tierrabomba.

El pozo Cárex ha sido uno de los principales suministros de agua dulce en el corregimiento insular que no cuenta con acueducto.

A sus 14 años Briniquilda Blanquicet Julio, o Brini como la conocen todos en el corregimiento de Bocachica, en la Isla de Tierrabomba, corría junto a sus compañeritas del colegio por las calles polvorientas del pueblo hasta el pozo Cárex, de donde sacaban agua fresca para bañarse antes de ir a clase.

Bocachica nunca ha tenido acueducto. Durante la época de la Colonia, la corona española construyó, en diversos puntos de lo que hoy es Cartagena de Indias, centros de producción en los que se fabricaba cal viva, tejas y ladrillos con los que se construyeron las edificaciones militares, eclesiásticas y civiles.

Esos centros de producción estaban conformados por hornos, albercas y pozos cuyos vestigios perduran hasta nuestros días. Algunos bienes, como el pozo Cárex, no han perdido su utilidad con el paso del tiempo y han hecho parte esencial de la vida cotidiana de sus habitantes.

Hoy en día Brini está llegando a los 70 años y recuerda nítidamente todas las actividades que se desarrollaban en su infancia y juventud en torno al pozo: los agricultores traían a sus animales a beber agua de una pequeña alberca contigua, las mujeres lavaban la ropa con ceniza de carbón para ‘clarear’ el agua y golpeaban las prendas con la ‘maretira’ o corazón de la mazorca para quitarles el sucio; adultos y niños se bañaban y restregaban la piel y el pelo con bolas de barro mucho antes de que los spa comercializaran los beneficios de sus propiedades naturales.

Muy poco ha cambiado desde entonces. El pozo Cárex o Carey, como lo conocen en Bocachica, sigue siendo uno de los principales suministros de agua dulce del corregimiento junto con el agua de lluvia que se acumula en tanques, y el bongo que lleva el agua desde Cartagena y vende un galón del líquido en mil pesos. Según Brini, hay que disponer de varios galones para el día a día.

Apoyo a la comunidad

La Escuela Taller Cartagena de Indias (ETCAR), como administradora de la Fortificaciones de la ciudad ha sido consiente de la importancia del pozo Cárex en la comunidad de Bocachica.

El director general encargado de la ETCAR, Luis Ricardo Dunoyer González, explica que “en las múltiples visitas técnicas que realiza la Escuela Taller, algunas de ellas en compañía de personal del Ministerio de Cultura; así como en el trabajo psicosocial que se adelanta en el corregimiento, se evidenció la importancia en la cotidianidad del corregimiento de esté Bien de Interés Cultural del ámbito nacional, que se encuentra bajo la salvaguarda de la Escuela Taller”.

Es por ello que dentro del Plan de Acción de la ETCAR se ha incluido, como primera medida en el 2015, la refacción del pozo y de la alberca contigua, así como la fabricación de una plantilla en cemento que direcciona, con una leve pendiente, el agua sobrante hacia un humedal cercano.

En el 2016 se construyó un tendal para brindar sombra a los que hacen uso del pozo, y en marzo de 2018 se construyó un lavadero comunitario.

“Queremos que el pozo Cárex siga siendo un espacio importante para la comunidad, que sus mismos habitantes velen por su cuidado y conservación, por eso se construyó un espacio adecuado para las personas que aún utilizan el agua del pozo para lavar la ropa, que incluye tres fregaderos con sus depósitos de agua, de esta forma, desde la Escuela Taller, trabajamos por la Ciudad de la Esperanza, siempre con el apoyo del Ministerio de Cultura y de la Alcaldía Mayor de Cartagena de Indias”, agrega el Director General (e) de la ETCAR.

En total, la Escuela Taller Cartagena de Indias, ha invertido un poco más de 19 millones de pesos en la adecuación del pozo Cárex para el aprovechamiento de la comunidad.

Los trabajos de adecuación se han realizado a través de la Fundación Vigías de Cárex, integrada por habitantes de Bocachica, en los que han participado nueve egresados de la ETCAR del curso de albañilería y tres carpinteros del corregimiento insular.

Una de las egresadas que participó en la construcción de los lavaderos fue Giselle Melissa Anzoategui De Ávila. Durante el 2017 hizo parte de la primera promoción de 50 aprendices formados por la Escuela Taller directamente en Bocachica, donde se abrieron los cursos complementarios de albañilería, en el que se formó Giselle; Carpintería de Rivera y Cocina.

A sus 22 años, nativa de Bocachica, Giselle afirma que el curso ha sido lo mejor que le pasado “porque me dio una fuente de trabajo y ha cambiado mi vida, me siento muy orgullosa de ser egresada de la Escuela Taller Cartagena de Indias”.

De esta forma, el pozo Cárex, junto con el tendal y los lavaderos construidos por la ETCAR, seguirán haciendo parte de la cotidianidad de las nuevas generaciones de Bocachica.

“Este pozo nosotros lo hemos disfrutado bastante, queremos que esto siga adelante, que la gente vuelva, yo soy una de las primeras que va a venir a estrenar esas bateas”, dice Brini mientras se echa baldados de agua fresca extraída del pozo antes de volver a su casa.

Articulo anteriorEn un 27% disminuyen las muertes por tuberculosis en Cartagena
Próximo articuloEste fue el balance en temas de seguridad que dejo la semana santa en Cartagena